Advertencia : Este reporte puede herir tu sensibilidad. Contiene información secreta, sólo difundida en ciertos círculos secretos de liderazgo, que puede cambiar para siempre tu forma de ver el mlm.
Si estás contento con tus ingresos, con tu plan de trabajo, y no deseas abrir tu mente a otro nivel, NO LO LEAS. Sencillamente bórralo y déjalo pasar.
L everage en inglés significa “apalancamiento”. Y es la razón básica para que todos los networkers hayamos entrado en este negocio.
“Dadme una palanca, y levantaré el mundo”- Arquímedes
Si aprendes a utilizar el “leverage”, te harás rico.
Pero antes que nada veamos por qué. Qué tiene que ver esto con el MLM.
Usar el apalancamiento supone hacerse rico, ganar ingentes cantidades de dinero. Es lo que hace que los líderes del MLM tengan mansiones, colecciones de coches y todo aquello que se pueda comprar.
Este concepto es vital para cualquier networker, por varias razones:
Si eres un networker a tiempo parcial, entonces tienes que sacrificar alguna de tus porciones personales (comer, estar con la familia, disfrutar ó pareja) para trabajar en tu negocio MLM. También podrías sacrificar horas de sueño, aunque esto al final te pasará factura…
Por eso, si quieres hacerte rico, tienes que usar el leverage inteligentemente.
Consiste en lograr que otras personas, cientos, miles de personas, colaboren contigo y te ayuden a crear tu negocio, invirtiendo parte de su tiempo y esfuerzo en el negocio.
De hecho, esta posibilidad es la que nos hace ingresar en el MLM, ¿verdad? El hecho de tener un inmenso grupo de gente trabajando para construir nuestro cheque mensual… sin ellos, nada es posible. Empleando tan sólo tus fuerzas, te será muy difícil lograr esa mansión, ese deportivo, ó esos diamantes para tu mujer…
Esta, y no otra, fue la razón por la cual yo compré un negocio MLM. No para matarme a trabajar, sino para usar el leverage de grupo y así lograr mis sueños.
Sin embargo, luego la cosa no es tan sencilla.
Nadie me dijo que tendría que ponerme a vender productos. Y nadie me dijo tampoco que para acceder a mi dinero, a las comisiones que mi grupo había creado con mi ayuda, tendría que cumplir ciertos requisitos.
Esto es insano. Todas las empresas MLM ponen muy alto el listón para acceder a tu dinero. Si quieres cobrar, tienes que hacerles ganar ANTES cierta cantidad de dinero mensual, bien sea en servicios ó en productos.
Es decir, te limitan y se quedan con parte de tu dinero si no cumples con sus normas. Y esto es vergonzoso. En este caso, si tú no superas los requisitos, ellos se quedan con tu leverage, y otros lo utilizan, en este caso, tu línea ascendente…
Es decir, que el fruto de tu trabajo no es realmente tuyo, sino que tu compañía lo maneja y decide si lo cobras ó no.
¿Duele, verdad?
Pero esto no es todo.
Los requisitos para cobrar tus comisiones suelen ser tan elevados que te obligan a estar “activo”: vendiendo y reclutando constantemente. Si no puedes- ó no quieres- hacerlo, entonces sencillamente tienes que sacar de tu bolsillo el dinero para pagar el salvoconducto que te permita cobrar tus comisiones.
Esto sin contar que puedes hasta perder tu equipo si no entras en el juego, es decir, si no accedes a sus exigencias.
Esto es algo que la mayoría de networkers en activo no ven: ellos no son dueños de su negocio en realidad, sólo están creando riqueza para la compañía, introduciendo más miembros que facturen miles de euros, pero en cualquier momento, sus comisiones se ven reducidas si ellos aminoran el ritmo de trabajo…
Y esto es, sencillamente una injusticia.
Ninguna empresa de MLM tendría que exigir al distribuidor más cantidad mensual que el consumo de una familia como requisito para cobrar sus comisiones.
El consumo de telefonía, de Internet, de productos de limpieza ó cualquier otro producto. Sólo lo que consumes mensualmente, en lugar de tener que comprar ó pagar y almacenar productos únicamente para cobrar tu cheque.
El fruto de tu trabajo es tuyo, estés más activo ó menos. Es decir, que cada vez que un miembro de tu equipo factura un segundo de telefonía, ó compra una crema para manos, tú deberías recibir una comisión, independientemente de si ese mes has facturado 1.000 euros ó 5.000.
No se te debería robar por no hacer lo que ellos consideran conveniente. Pero lo hacen, y nosotros lo acatamos. Al fin y al cabo, son las reglas del juego, y aunque la mayoría de las veces nadie te lo advirtió antes de entrar al negocio, una vez dentro lo asumes y cumples, qué remedio.
Además, está mal visto protestar y decir lo que piensas. Si no te gusta el negocio, siempre puedes irte a otra parte… claro que tu equipo se queda donde está, deja de ser tu equipo para ser suyo, y así seguir beneficiando a tu línea ascendente y a tu empresa.
Siento mucho ser tan crítico, pero cuando ves la verdad, y eres consciente del manejo oculto del MLM, te vuelves un poquito “revolucionario”…
Sin embargo, no he escrito este reporte para hacer que te sientas mal, para que creas que el MLM es un fraude y que luches contra tu compañía… en absoluto.
El MLM es una de las formas de negocio más lucrativas, sencillas y gratificantes que existen en el mundo, y somos unos afortunados por estar aquí.
Lo que pretendo es todo lo contrario.
Es que aprendas cómo aprovechar el leverage en tu propio beneficio. De forma inteligente, y saltándote las duras condiciones de tu compañía.
Es crear un MLM auténtico, basado en el consumo de productos, y no tanto en la venta directa, que tanto gusta a las empresas. Si vendes mucho, cobras tus comisiones, y te recompensan… pero ¿y si no? No tienes derecho a nada…
Bueno, pues te propongo un juego. Juguemos a sacar el máximo provecho de tu negocio.
Pongamos por caso que tienes una organización de 50 personas. Hay dos líderes, que son los más activos; buscan nuevos miembros, venden, y están muy motivados con el negocio. El resto, los otros 48, son gente a tiempo parcial, que no tienen experiencia en ventas, a muchos ni siquiera les gustan, y han introducido en el equipo básicamente a sus familiares y amigos más directos.
Es decir, tienes 2 personas activas y 48 inactivas.
¿Por qué?
Porque el nivel de exigencia que la gente encuentra, una vez que se han unido al negocio es muy alto, y ellos no lo sabían cuando entraron en él.
Piénsalo por un momento. Normalmente, la forma clásica de reclutar personas para un MLM es a través de un amigo, familiar ó por un anuncio. Cuando los candidatos reciben la información, nadie les dice que tendrán que facturar 1.000 euros al mes ó más para cobrar sus comisiones mes a mes.
¡Si lo hicieran, nadie firmaría!
El reclutador se concentra en que el candidato firme ahora, se comprometa y empiece el negocio invirtiendo cierta cantidad de dinero. De los demás “detalles” ya habrá tiempo para hablar.
Es increíble, pero así funciona.
Todos saben que si dieran “toda la información” desde el principio, el 90% de la gente se echaría atrás. Así que es mejor ocultarla, y después, una vez que el nuevo miembro ya está “dentro”, ya ha invertido dinero y dado su palabra al nuevo proyecto, podrá ir sabiendo la segunda parte…
El ser humano suele ser coherente con sus decisiones, y una vez han tomado una decisión, sigue avanzando en consonancia con lo que han decidido.
Por eso esta estrategia funciona tan bien.
Imagínate. Es como cuando vas a comprarte un coche. Miras varios modelos, colores, precios, y tomas tu decisión. Una vez tomada, el vendedor aprovecha para incluirte las alfombrillas, los parachoques deportivos, el seguro a todo riesgo y un sinfín de “extras” que no habías previsto al comienzo, pero que, como has decidido comprar el coche, no eres capaz de rechazar, sólo para estar en consonancia con tu elección. En fin, “ya puestos”…
En el MLM no es diferente.
Te acercas buscando una oportunidad de ganar dinero, de conseguir tus sueños, y ellos lo saben. Te dejas deslumbrar por el éxito de los líderes, deseas ser como ellos, y estás dispuesto a hacer lo que sea para lograrlo. Ni siquiera se te ocurre pensar en qué pasará después. Sencillamente vas y entras. La letra pequeña es tan pequeña que ni se ve… hasta que pasa el deslumbramiento y todo se muestra tal cual es.
Pero entonces, en la mayoría de las veces, es tarde. Ya estás dentro, y hay que continuar…
Bueno, pero me estoy apartando del modelo anterior. Sigamos donde estábamos.
Tienes 2 miembros activos y 48 inactivos. Bien.
Lo más probable es que esos 48 vayan desapareciendo poco a poco, desengañados de ver que no pueden alcanzar el nivel exigido para cobrar sus comisiones, que era lo que ellos querían. Sólo quedarán los 2 activos, que seguirán buscando gente nueva. Seguramente consigan algún otro miembro activo, pero el resto, la inmensa mayoría, se irán del negocio.
Esto obliga a hacer una criba constante de gente, a mover muchas personas para conseguir pocos resultados. Además de que las comisiones no son sólidas, no hay una base de miembros fuerte, porque van y vienen todo el tiempo.
Esto crea inestabilidad y poca seguridad en el negocio, quemando a los activos y echando del equipo al resto.
Entonces, ¿qué podemos hacer para apoyarnos en nuestro equipo, que la gente permanezca en el negocio y que el leverage juegue a nuestro favor?
Bien, hay algunas cosas que podemos hacer al respecto.:p>
Pero antes, quiero advertirte de algo.
Esta información no es secreta, pero debería serlo.
¿Por qué? Por varios motivos.
El primero, porque puede que a tu empresa no le guste el hecho de que te vuelvas “creativo” e “independiente”, dándole la vuelta a sus normas.
El segundo, porque a tu línea ascendente seguramente no les guste el hecho de que su cheque se vea reducido, mientras tú ganas más dinero.
El tercero, porque salirte del rebaño no suele gustar en las compañías MLM.
El cuarto, porque estás usando el MLM como una pieza más para hacerte rico, en lugar de ser lo único que te aporta riqueza.
Se me ocurren varias más, pero no creo que sea conveniente exponerlas aquí. La cuestión es que, si cuando leas esto, sientes que está mal, que no es para ti, y que prefieres seguir haciendo lo que haces ahora, te pido que cierres este documento y lo destruyas de inmediato.
Mi intención no es “pervertir” a los miembros de ninguna empresa multinivel, ni crearles problemas. Sencillamente mi misión es darles información, argumentos, y estrategias para que realmente puedan construir un imperio de libertad económica y personal, nada más.
Pero estoy seguro de que esto no le va a gustar a todo el mundo, y por eso te advierto: no muestres esta información a nadie que intuyas pueda estar en contra de introducir “innovaciones” en el marketing MLM. Esto va, sobre todo, para tu patrocinador y tus líderes ascendentes. Te ahorrarás muchas decepciones, te lo digo por experiencia…
Bien, sigamos.
Volviendo al asunto anterior:
Entonces, ¿qué podemos hacer para apoyarnos en nuestro equipo, que la gente permanezca en el negocio y que el leverage juegue a nuestro favor?
Como te decía, podemos hacer varias cosas para lograr esto. Echa un vistazo a esto y mira si se ajusta a tu modelo de negocio:
1. Hay que procurar que el gasto mensual en productos ó servicios no sean superiores al consumo familiar. Es decir, como comentábamos antes, sólo deberías exigir que tus miembros consuman vuestros productos. Que usen vuestro servicio telefónico, vuestros cosméticos ó vuestra línea de Internet. Nada más. Este tendría que ser el único requisito para permanecer en el equipo - y para ganar dinero- y es un requisito fácil de cumplir.
Supongo que estarás pensando: “pero si sólo consumen, sin vender ni almacenar, no alcanzarán el mínimo exigido por la compañía para cobrar las comisiones”. Tienes razón. Pero sólo en parte.
Aquí es donde entra la magia del leverage. Y de las matemáticas.
Si tú tienes 48 personas que “consumen” los productos quizá tu volumen de negocio no alcance para que tu empresa te pague las comisiones. Pero, ¿y si tuvieras 480 personas? Entonces seguramente este volumen sí cumpliría el nivel exigido, y podrías cobrar tu comisión…
Te estoy hablando de un gran grupo de consumidores, de un inmenso “club” de consumidores de tu producto, que a fuerza de ser muchos, suman el volumen que necesitas, sin tener que vender nada fuera de su consumo personal.
Claro que construir ese Club te llevará un tiempo, y mientras tanto, como no estás cumpliendo las normas de la empresa, no estás recibiendo tus comisiones, ¿entonces qué podemos hacer? Esto nos lleva al punto 2.
2.- Introducir uno ó más productos -anexos al negocio- que no sean de la empresa, sino tuyos, y que permitan obtener ganancias mientras el negocio MLM crece.
Estos productos son comprados por el nuevo miembro del equipo cuando se une a él, y genera una comisión instantánea a su patrocinador, independientemente de la compañía de MLM. Debe ser una comisión adecuada, para que cuando firmes nuevas personas, puedas tener un nivel de ingresos que te permita seguir en el negocio.
Esto permite crear un enorme club de consumidores que están ganando dinero a corto plazo, con tus productos anexos, y a largo plazo, con los productos de tu MLM.
Al final, cumplirás con los requisitos que tu empresa te impone, pero de forma natural, por el número de miembros de tu grupo, en lugar de hacerlo vendiendo en la calle, ó pagando y almacenando productos que no necesitas tan sólo para cobrar tus comisiones.
Este es el auténtico Leverage: apoyarte en un enorme grupo de personas que consume pequeñas cantidades al mes, de forma regular y constante, en lugar de cargar sobre unas pocas personas todo el volumen de tu negocio, obligándolas a vender y a mantener un ritmo de consumo falso.
¿Ventajas? ¡Todas!
· Nadie se marcha del negocio. ¿Cómo se van a marchar si están ganando dinero sin matarse a trabajar? · Si alguien se va, no supone una catástrofe. Si un miembro del club deja de consumir 100 euros, aún tienes 500 miembros consumiendo 50.000 al mes. No hay problema. · El liderazgo puede dedicarse a eso: a liderar y a ayudar a su grupo, en lugar de estar angustiados permanentemente buscando “sangre fresca” que les permita cobrar sus comisiones al mes siguiente. · Potenciamos el branding y promocionamos nuestro grupo. Eliminamos la competencia. · Y lo más importante: eres independiente de tu empresa. Tú utilizas el plan de marketing de tu compañía a tu conveniencia para ganar dinero, en lugar de estar subyugado por él.
Eso es lo que hago en el Sistema Marketing Prodigioso. Un Sistema de Marketing independiente, donde el liderazgo y la persona son mucho más importantes que el volumen ó los requisitos.
Un Sistema que comienza con el Curso Marketing Prodigioso, -por cierto, si no lo tienes aún, si no eres capaz de invertir unos miserables 40 euros para aprender cómo usar el leverage en tu beneficio mal asunto-.
Marketing Prodigioso es una estrategia racional de marketing, exclusiva para mi equipo, que permite ganar muchísimo dinero hoy, y construir un imperio a largo plazo… utilizo a mi compañía en mi beneficio, a mi antojo, en lugar de ser utilizado por ella.
Un Sistema Real Libre de competencias, Libre de exigencias, Libre de las compañías. Soy el amo y señor de mi MLM.
Me alegra tanto compartir esto contigo, que no tengo inconveniente en que lo envíes a quien tú quieras.
Recuerda: esta información NO es para todo el mundo.
Recibe un cordial saludo
Jesús Torralba
Fundador y Presidente |